¿Qué ocurre?
Enlutan sus cuerpos, cuando el Alma sufre. Persiguen el Cielo, cuando llora el llanto. Acurrucan penas, cuando el aire azota. Invaden con suspiros, cuando inunda el agua. Y cuando existe calma y brilla el sol... ¿Qué ocurre? Cada cual se absorta en la vivencia propia.